En venta casa terrera antigua a reformar, una propiedad con un encanto especial y un enorme potencial para quienes buscan diseñar un hogar a su medida o invertir en un proyecto inmobiliario con amplias posibilidades.
La finca cuenta con una superficie total registrada de 222 m² como solar, lo que ofrece múltiples alternativas de uso y aprovechamiento. Dentro de esa superficie se encuentran la vivienda y el garaje, además de una amplia azotea transitable.
El garaje, de 93 m², es uno de los grandes atractivos de la propiedad. Su amplitud permite albergar varios vehículos y al mismo tiempo destinar espacio a taller, zona de almacenaje o cualquier otro uso que el futuro propietario quiera darle. Además, dispone de un baño auxiliar y de una puerta de acceso hacia la vivienda, actualmente condenada, pero que podría rehabilitarse para recuperar la conexión directa entre ambas zonas.
La vivienda principal cuenta con unos 129 m² construidos, distribuidos de manera funcional y con estancias amplias que ofrecen un sinfín de posibilidades de redistribución. Al acceder, encontramos un recibidor de entrada que conduce a dos habitaciones frontales, perfectas como dormitorios o despachos. El salón central actúa como eje de la casa, conectando con el resto de las estancias: una cocina independiente, dos habitaciones adicionales y un baño principal. Esta distribución permite mantener el carácter tradicional de la vivienda o bien transformarla completamente con un proyecto de reforma integral.
En la parte superior se encuentra una azotea transitable que cubre toda la superficie de la vivienda y el garaje, convirtiéndose en un espacio polivalente con un enorme potencial. Desde crear una gran terraza familiar hasta habilitar una zona de ocio, jardín urbano o incluso estudiar ampliaciones futuras, este espacio añade un valor añadido muy interesante.
La condición de la finca como solar registrado multiplica sus posibilidades: no solo es una opción ideal para rehabilitar la vivienda existente y devolverle su carácter, sino también para levantar un nuevo proyecto de construcción que aproveche todo el potencial edificable de la parcela.
En definitiva, se trata de una propiedad única, con ubicación, dimensiones y versatilidad, que ofrece la oportunidad de invertir con visión de futuro o de construir la vivienda soñada en un entorno con historia y personalidad.